En el mismo se destaca la necesidad de las Organizaciones de adaptarse al cambio que esta generando la incorporación de una nueva camada de jovenes profesionales, la Generación Y, al ámbito laboral y que resulta practico para entender en cierta forma cuales son los escenarios que se avecinan en el mercado laboral, ademas de interpretar el perfil laboral de las personas que usan facebook.
Ya que aun no esta disponible en enlace del mencionado articulo, transcribo a continuación una pequeña parte del mismo, que nos puede ayudar a disertar:
Es hora de desarrollar otro enfoque para gestionar el talento joven. ¿Nos animaremos a romper viejos paradigmas?¿Seremos capaces de desafiarnos a nosotros mismos como lideres?¿Tendremos la valentía de desechar exitosas prácticas del pasado y embarcarnos en otras aún no probadas?<Como se menciono en clase, todo esto resulta interesante y útil para la formación de profesionalidad, no solo para aquellos que formamos parte de otras generaciones, sino también para aquellos que forman parte de la Generación Y, ¿Porque? Por que nos da una idea de la situación contextual, en la que los que no forman parte de esta generación deben saber cual es su competencia y cuales son las cualidades a explotar, y para aquellos que si forman parte de ella, para saber cual es la visión que el mundo laboral hoy tiene de ellos.
- Lo que si está claro es que si queremos ser los protagonistas de los cambios que se avecinan primero debemos dejar de sentirnos víctimas de esta nueva generación.
- No será sencillo para la organizaciones implementar prácticas que impliquen negociar aspectos absolutamente nuevos en la relación laboral y desafiar la manera en que el trabajo se viene desarrollando desde hace décadas.
- Y mucho menos sencillo será para los empresarios y gerentes desarrollar un liderazgo basado más en la confianza y el respeto que en la autoridad y el control. Sin embargo, no nos queda otra alternativa.
- La Generación Y representa en la actualidad un recurso vital para las empresas. Los enormes costos de encontrar y contratar talento sobresaliente en la actualidad, sin mencionar los millones de dolares en productividad que no se obtienen cuando los empleados no se sienten comprometidos con sus trabajos, resaltan la necesidad de dedicar más tiempo y recursos para atraer, desarrollar y gestionar el talento joven.
- Los lideres de las generaciones anteriores debemos bajarnos del pedestal y dejar de evaluar si nos gusta o no trabajar con la Generación Y. Es tiempo de admitir que la forma de trabajar en las organizaciones está cambiando y que tenemos suerte de contar con un grupo de personas optimistas y con gran autoconfianza liderando este cambio.
- Si queremos sacar provecho de esta nueva generación, deberemos tomar medidas imaginativas, dialogadas y pactadas, que no rechacen el talento joven. Y en todo caso, sincerarnos y admitir que la mayor desgracia de la juventud actual es que ya no pertenecemos a ella.